Publicado por Yoveinny Mota, una velocista venezolana con un corazón lleno de pasión y tenacidad, ha grabado su nombre en las páginas doradas del deporte al conquistar un cupo para sus primeros Juegos Olímpicos en la modalidad de 100 metros vallas, una hazaña que se materializará en el magno evento deportivo que tendrá lugar en París en el año 2024.
Su camino hacia la gloria olímpica se gestó en el torneo «West First Round NCAA División 1», celebrado en el marco del sistema universitario estadounidense. Allí, Yoveinny brilló con luz propia al registrar el segundo mejor tiempo de la competencia, deteniendo el cronómetro en 12.67 segundos. Esta marca superó con creces la exigente marca mínima establecida por el Comité Olímpico de 12.77 segundos, abriendo las puertas a su participación en la máxima cita deportiva del mundo.
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Yoveinny Mota: orgullo de Venezuela
La clasificación de Yoveinny Mota no solo representa un logro personal, sino que también se convierte en un motivo de orgullo para toda Venezuela. Su nombre se suma a la lista de atletas venezolanos que representarán al país en las próximas Olimpiadas, llevando consigo la bandera tricolor y el espíritu inquebrantable de una nación que vibra por el deporte.
Más allá de su talento innato, Yoveinny Mota es un ejemplo de dedicación, perseverancia y disciplina. Su camino hacia la cima no ha estado exento de desafíos, pero su pasión por el atletismo y su incansable espíritu de lucha la han impulsado a superar cada obstáculo con determinación y entereza.
«Los sueños están destinados a quienes trabajan día a día para conseguirlos«, expresó Yoveinny en sus redes sociales, palabras que reflejan a la perfección su filosofía de vida y la inspiración que representa para las nuevas generaciones de atletas venezolanos.
Dedicatoria especial
En este camino hacia París 2024, Yoveinny no ha estado sola. El apoyo incondicional de su familia, su esposo y de Dios ha sido fundamental para alcanzar sus metas. A ellos dedica este logro, fruto de su esfuerzo y sacrificio.
Yoveinny Mota es una atleta excepcional, pero sobre todo es una mujer inspiradora. Su historia nos recuerda que con pasión, trabajo duro y una actitud positiva, todo es posible. Ella es el vivo ejemplo de que los sueños, sin importar cuán grandes o desafiantes parezcan, pueden convertirse en realidad.