ficaces:El último recuerdo de Miguel Rojas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, antes de su participación en la temporada 2023-2024, había sido amargo. Casi un lustro pasó desde aquella eliminación de Tiburones de La Guaira frente a Caribes de Anzoátegui en semifinales, con imágenes difíciles de olvidar en el dugout visitante del Estadio Alfonso “Chico” Carrasquel de Puerto La Cruz.
En aquel certamen 2019-2020, con Renny Osuna como mánager, el cardumen avanzó como el mejor sembrado hacia la postemporada. Pero en el camino algo se torció, hasta llegar al doloroso desenlance para la afición del equipo. Ese es un recuerdo que el experimentado grandeliga optó por dejar atrás, entusiasmado por el descollante comienzo en el Round Robin que, hasta antes de la jornada del lunes 8 de enero, mantenía a los escualos con paso perfecto de 5-0.
Tiburones Motivados:
“Para nosotros este inicio es una motivación”, dijo Rojas a Efraín Zavarce para IVC Networks el domingo antes del segundo triunfo en fila de la fase contra Leones del Caracas. “Creamos el momentum en la etapa, sabemos que son 16 juegos y aún nos falta camino por recorrer para llegar a la final, pero cuando comienzas de esta forma, sientes que estás construyendo algo importante”.
El regreso al circuito del jugador de 34 años de edad era esperado por los fieles guairistas desde hace algunos torneos. Incluso, en el anterior, se entrenó durante tres semanas de diciembre hasta finalmente desistir de participar, debido a molestias en la muñeca derecha, operada en octubre.
Aunque se quedó con el sinsabor de no haber sido parte de la Gran Final pasada, desde muy temprano en su retorno con los Dodgers de Los Ángeles en la Gran Carpa durante el 2023, el mirandino dejó claras sus intenciones de ser parte de este nuevo intento de la organización salada de acabar con la sequía de títulos.
Miguel Rojas manda advertencia:
“Esta es la versión de Tiburones con mayor talento en la que he jugado, sobre todo por el tiempo de experiencia en Grandes Ligas, y también en la LVBP, que tenemos en el lineup”, analizó Rojas, quien transita también su zafra número 10 en la pelota rentada local de invierno, todas con La Guaira, incluida la 2011-2012, cuando disputó la primera serie por el gallardete de la franquicia en 25 años.
“La incorporación a mitad de temporada de jugadores como Yasiel Puig, y la presencia de peloteros como Maikel García, Alcides Escobar, Ehire Adrianza o Brayan Rocchio, con experiencia grandeliga, además de Luis Torrens y Francisco Arcia, ha conformado un buen grupo”, continuó el oriundo de Los Teques. “Incluso, hasta los más jóvenes tienen experiencia. Tenemos una alineación muy profunda”.
Ante un clubhouse con tanta presencia rutilante, la gestión de personalidades se convierte en un aspecto tan importante como puede serlo la producción de carreras o la realización del envío adecuado desde el montículo. Es allí, donde el papel del piloto adquiere otro nivel de preponderancia.
“La diferencia la marca Oswaldo Guillén con su experiencia. Ya ha estado en instancias como estas, tanto acá en Venezuela, como en Estados Unidos, y ha dirigido a equipos con mucho talento”, aseguró Rojas. “En este dugout tenemos a 40 o 45 seres humanos con su ego y distintas personalidades. Él sabe cómo manejarlos a todos. Da rotación (en el lineup) para mantenerlos calientes, y a pesar de que salgamos con una alineación diferente a la del juego anterior, siempre salimos con las mismas oportunidades de ganar”.
Eficaces:
Para el eficaz jugador de cuadro, el triunfo frente al Caracas en el último compromiso de la ronda eliminatoria, que garantizó el pase directo al Todos Contra Todos, sumado al buen arranque ante los capitalinos en la postemporada, es el ambiente propicio para aumentar el ímpetu.
“La confianza es muy importante, porque llegas a cada compromiso convencido de que puedes ganarle a tu rival, aunque esté arriba en la tabla”, mencionó Rojas. “Hoy somos nosotros quienes estamos arriba, e intentaremos mantenernos allí”.
EL DATO
Miguel Rojas inició el presente Round Robin con sólido promedio de bateo vitalicio de .333 (de 90-30) en cuatro participaciones previas en el formato (30 juegos). Su primer jonrón en cualquier fase de postemporada en el circuito lo conectó el sábado frente a Leones, ante los envíos de Jesús Vargas, sin hombres en circulación.
Escrito por Prensa LVBP