Los entrenadores que desarrollan a los prospectos nicaragüenses antes de que ellos estampen su firma con una organización de Grandes Ligas son la clave.
Para que los peloteros pinoleros puedan traspasar el colador de las Ligas Menores o llegar lo más lejos posible en el sistema de desarrollo de los conjuntos de MLB, que cada día es más competitivo.
Nicaragua es un país que cuenta con una historia de más de 100 años jugando a la pelota. El deporte que se juega con bates, manoplas, bases y con una bola construida por costuras que se dispara desde un montículo hacia el artillero que se planta en el home plate.
No obstante, la mayoría de los prospectos coetáneos en el beisbol organizado no pasan del muro de los lamentos de Clase A avanzada. O las franquicias con las que firman, le dan release a uno a dos años después de que estamparon su rúbrica con un club de Grandes Ligas.
Muchos jugadores que les han dado de baja por su rendimiento discreto, o por qué, sus habilidades no convencen a los equipos que pertenecen, declaran que cuando están en Ligas Menores se sienten en alguna desventaja. en cuanto a detalles tácticos y básicos del beisbol con respecto a sus homólogos norteamericanos.
Esta desventaja que sienten los nicaragüense, se debe a detalles tácticos y básicos del juego.
También se sienten por debajo del nivel de sus colegas del caribe.
Este fenómeno se debe a que Nicaragua carece de entrenadores competentes.
Federaciones dentro del Deporte de Nicaragua
Ninguna federación deportiva se ha preocupado por capacitar a los entrenadores de forma adecuada, ni siquiera la de beisbol.
En los tiempos de don Carlos García muchos coaches, iban varios días a los campamentos de Spring Training previos a la temporada regular.
Ahora emular esa maniobra se vislumbra a años luz.
En Nicaragua, aún existen entrenadores en categorías infantiles que piensan que correr 30 minutos sin parar, o dar 10 vueltas alrededor del campo mejora la condición física.
También hay otros que poseen la idea de que vociferar una arenga con bastante vehemencia a sus dirigidos, como la clásica que son capaces de derrotar a los Dodgers de Los Ángeles o al Bayern Munich.
Como si esa hipérbole, algo trillada en la era de globalización potenciará las habilidades de los niños y muchachos bajo su tutela.
No es culpa de ellos ese proceder, debido a que han nacido y crecido en ese ecosistema. También existen otros que ostentan la perspectiva errada, de que ya lo saben todo por haber sido jugadores de primera división nacional.
Está comprobado que un buen profesor o entrenador es vital, de gran incidencia, para la persona la cual está formando.
En la década de los sesentas, el Instituto Ramírez Goyena, ofrecía un cuerpo de docentes preparados y los bachilleres que producía ese centro de estudios.
Aprobaban los exámenes de admisión de la Unan Managua o de su sucursal León, clasificándose en ambas evaluaciones en primera opción.
También se podía visualizar a varios estudiantes que no podían culminar sus carreras universitarias que provenían del Goyena, sin embargo, plasmaban los conocimientos pertinentes para poder trabajar en los planteles de carretera elaborando planos.
Algo similar en las dos décadas siguientes calcó el estudiantado que cursó en el Experimental México, gracias a su competente cuerpo de profesores, se forjaron futuros: contadores, ingenieros, músicos y algún alumno que quedó hasta tercer año de Agronomía, pero que se transformaba en un excelente periodista de deportes.
En Estados Unidos se puede apreciar que peloteros universitarios elegidos en el Draft, al año siguiente están lanzando o bateando en un estadio de Grandes Ligas, lo demuestran la clases de 2014 y 2015.
Como por ejemplo nombres como: Kyle Schwarber, Carlos Rodón, Aaron Nola, Michael Conforto, Trea Turner, Brandon Finnegan, estaban arribando a MLB en menos de 365 días de ser reclutado.
En el caso de Finnegan es el único pelotero en lanzar disparos en la Serie Mundial de MLB y en la Serie Mundial Universitaria. Por otro lado, Alex Bregman, Dansby Swanson, Andrew Benintendi, Carson Fulmer de la generación del Draft 2015 estaban haciendo su debut en Las Mayores en 2016. Por ese tipo de competencia son eclipsados los peloteros nicaragüenses.
Mientras tanto, en Nicaragua el único que ha pavimentado un camino de ascenso meteórico como el de esos prospectos norteamericanos mencionados en los dos párrafos anteriores fue Vicente Padilla, quien fue firmado, el 24 de agosto de 1998 por los Cascabeles de Arizona y estaba haciendo su debut con ellos, el 29 de junio de 1999, frente a los Rojos de Cincinnati, un caso extraordinario, por algo es el mejor pelotero nacional de todos los tiempos, después de Dennis Martínez.
Nicaragua cuenta con pocos peloteros más allá de la categoría Doble A en la actualidad, a pesar de ser un país que juega beisbol por más de 100 años, se debe hallar una forma de cambiar esa realidad y para eso un buen entrenador para un pelotero desde que es niño es vital.
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Escrito por: Helmut Canales/ Twitter: @HelmutCanales Correo: helmutcanales@hotmail.com
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