Publicado por Greg Maddux plasmó un dominio superlativo en las Grandes Ligas, sin necesidad de ostentar una recta de 99 millas como Roger Clemens, tampoco ponchó a 300 bateadores en una temporada como Randy Johnson.
Sin embargo, el profesor fue el mejor lanzador con el rendimiento más álgido durante toda la década de los 90 s.
Por lo tanto, siempre es un deleite recordar al científico del montículo con un texto, una mención en una plática entre amigos, escudriñando sus cifras tradicionales o sus estadísticas avanzadas en Baseball Reference.
Incluso los serpentineros de la actualidad estudian sus aperturas, que se pueden encontrar en Youtube.
Greg Maddux un inmortal del beisbol
El primer ganador de 4 Premios Cy Young de manera consecutiva debutó en MLB a los 20 años de edad con los colores de los Cachorros de Chicago. Experimentó dolores de crecimientos con la novena de la ciudad de los vientos en sus dos primeras temporadas (1986 y 1987).
En el primer curso publicó un balance de 2-4 con 5.52 de promedio de efectividad en 5 aperturas.
Al año siguiente forjó un récord de 6 victorias y 14 derrotas en 27 presentaciones como abridor. También tuvo el peor promedio de carreras limpias (5.61) y de WHIP (1.638) de la Liga Nacional. No obstante, dejó huellas de su calidad el 1 de julio de 1988 al limitar a 4 imparables a los extintos Expos de Montreal en 9 entradas. Ese partido, el profesor lo ganó 1 a 0.
Greg Maddux como todo buen científico de manera inteligente descubrió que la magia de su dominio como pícher se iba a basar en el control y la localización de sus lanzamientos.
En 1988 floreció al registrar una marca de 18-8 con un porcentaje de carreras limpias permitidas de 3.18. Este fue el inicio de una racha de 17 temporadas consecutivas de al menos 15 victorias.
Es la racha más larga del segmento de los juegos ganados para un serpentinero en los anales del mejor beisbol del mundo.
“El Profesor”
se estableció como el as de los Cachorros en 1989 con 19 triunfos, incluido un encuentro vital de septiembre en el Estadio Olímpico de Montreal que aseguró el segundo campeonato de la División Este (En esa época no existía la División Central en MLB) de la Liga Nacional para la novena que representa a la ciudad en donde está ubicada la torre Sears.
Después de temporadas consecutivas de 15 victorias en 1990 y 1991, Maddux ganó 20 juegos en 1992, empató en el liderato de la Liga Nacional en ese escalafón y fue galardonado con su primer Premio Cy Young de la Liga Nacional.
“El científico” incursionó en el mercado de la oferta y la demanda. Sin embargo, las conversaciones contractuales con los Cachorros se volvieron polémicas y cesaron.
Tanto el gerente general de Chicago, Larry Himes, como el agente del profesor, Scott Boras, acusaron al otro de no negociar de buena fe.
Los de Chicago finalmente decidieron perseguir a otros agentes libres, incluidos José Guzmán, Dan Plesac y Candy Maldonado. El oriundo de San Angelo, Texas, después de siete temporadas en la urbe donde pernoctó Michael Jordan, firmó un contrato de cinco años y $ 28 millones con los Bravos de Atlanta.
Maddux hizo su debut con los Bravos el 5 de abril de 1993, como abridor del día de apertura contra los Cachorros en Wrigley Field, superó a sus ex compañeros de equipo 1-0. Terminó la temporada regular con una foja de 20-10, lideró el viejo circuito con una
efectividad de 2.36 y ganó su segundo Premio Cy Young al hilo. Empezaba a hilvanar su propia leyenda.
Durante la temporada de 1994, acortada por la huelga, registró una efectividad de 1.56, la segunda más baja desde el histórico 1.12 de Bob Gibson en 1968, el último año de la época del montículo elevado, y la más baja en el mejor beisbol del mundo desde el 1.53 de Dwight Gooden en 1985.
El promedio de bateo de Maddux en ese curso (.222) fue más alto que el que graficó de carreras limpias permitidas desde el box.
También lideró el viejo circuito en juegos ganados (con 16) y entradas lanzadas (202) , cifras que derivaron su tercer Premio Cy Young sucesivo y un sendero rumbo a Cooperstown . Maddux finalizó en el quinto puesto en la votación del M.V.P en 1994.
En la temporada de 1995 colocó su nombre a la par del de las vacas sagradas del montículo, compiló una marca de 19-2 y publicó la tercera efectividad más baja desde Bob Gibson con 1.63, el profesor se convirtió en el primer lanzador en facturar un promedio de carreras limpias permitidas en temporadas consecutivas por debajo de 1.80 desde Walter Johnson en 1918 (1.27) y 1919 (1.49).
También se erigió como el primer pícher en la historia en ganar 4 Premios Cy Young de manera consecutiva. La efectividad de 1.63 de Maddux se produjo en una campaña en que el porcentaje de carreras limpias permitidas en general de la liga fue de 4.23.
Desde el comienzo de la era de la pelota viva en 1920, solo ha habido cinco ocasiones en que los lanzadores plasmaron una efectividad durante la temporada por debajo de 1.65: Gibson y Luis Tiant en la anómala temporada de 1968, Gooden en 1985. Y por supuesto, Maddux, dos veces.
Entre junio y julio de 1995, lanzó 51 entradas consecutivas sin emitir una base por bolas.De 1996 a 1998, terminó quinto, segundo y cuarto respectivamente en la votación de Cy Young.
La producción en victorias de Maddux se mantuvo constante: un récord de 19–4 en 1997, 18–9 en 1998, 19–9 en 1999 y 2000, 17–11 en 2001, 16–6 en 2002 y 16–11 en 2003, su última temporada con los Bravos de Atlanta. De 1993 a 1998, encabezó la Liga Nacional en efectividad en cuatro temporadas (1993, 1994,1995 y 1998), y fue segundo las otras dos campañas.
El Maddux
Hace unos años, al escritor Jason Lukehart, un fanático obsesivo de Maddux , se le ocurrió el concepto de “The Maddux”.
Es simplemente esto: cualquier pícher que lanza una blanqueada de nueve entradas en menos de 100 lanzamientos ha lanzado un Maddux. El 22 de julio de 1997, Greg tiró un juego completo con solo 78 lanzamientos (63 strikes y 15 bolas) contra los Cachorros, fue un rival pernicioso para la novena en donde esbozó sus primeros disparos en MLB.
Tres semanas antes, el 2 de julio tuvo su revancha personal ante los vigentes campeones, los Yanquis de Nueva York. Los humilló en la Gran Manzana, por medio de una lechada de 84 lanzamientos.
“El profesor” había perdido 3 a 2 el sexto juego de la Serie Mundial de 1996 ante los del Bronx.
Los números finales del científico en su desquite fueron los siguientes: nueve entradas, tres hits, sin base por bolas, ocho ponches, un viraje, una doble matanza y 84 lanzamientos.
Todo eso dilató dos horas y nueve minutos. Es decir, 23 minutos menos que ir a ver al cine o en la comodidad de cualquier casa la película “Dark Knight” de Batman. Cinco días antes había derrotado a los Filis con una faena completa de 90 disparos.
Sus Hitos
En 1997, solo otorgó solo 20 bases por bolas en 1997, incluidas seis caminatas intencionales Maddux ponchó a más de 200 bateadores por única vez en su carrera en 1998.
Durante la mayor parte de sus años con los Bravos, emuló la tradición de otros grandes lanzadores como Steve Carlton, con su propio receptor personal. En varias ocasiones, “el científico” usó a Charlie O’Brien, Eddie Pérez, Paul Bako y Henry Blanco para la mayoría de sus aperturas en vez de Javy López, el titular detrás del home.
Con los Bravos, ganó la Serie Mundial de 1995 sobre los Indios de Cleveland .
Fue vanguardista en lograr una serie de hazañas y récords, fue el primer lanzador en la historia de las Grandes Ligas en ganar el Premio Cy Young cuatro años consecutivos (1992–1995), igualado más adelante por Randy Johnson.
Durante esas cuatro temporadas, Maddux tuvo un récord de 75-29 con un promedio de efectividad de 1.98, mientras tanto al mismo tiempo en ese lapso permitió menos de un corredor por entrada.
Es el único lanzador en la historia de la MLB en ganar al menos 15 juegos durante 17 temporadas consecutivas. Además, como valor agregado ostenta la marca de más guantes de oro ganados por un jugador de cualquier posicióncon 18.
Greg Maddux gracias a su excelente control ganó más juegos durante la década de 1990
que cualquier otro lanzador con una foja de 176-88 con 2.54 de promedio de carreras limpias permitidas y un porcentaje de triunfos de .667.
Es octavo en la lista de victorias de todos los tiempos con 355, detrás de Cy Young(511), Walter Johnson (417), Pete Alexander (373), Christy Mathewson (373), Pud Galvin (365) , Warren Spahn (363) y Ken Nichols (362)
Desde el comienzo de la era de la pelota viva, que es posterior a 1920, solo Warren Spahn (363) registró más victorias en su carrera que Maddux. Es uno de los únicos 10 lanzadores en lograr 300 victorias y 3,000 ponches.
Es el único pícher con más de 300 juegos ganados, más de 3,000 ponches y menos de 1,000 bases por bolas.
Greg Maddux tuvo en carrera de 23 años que se disgregó con los Cachorros de Chicago, Bravos de Atlanta, Padres de San Diego y Dodgers de Los Ángeles. Sus cifras finales fueron 355 victorias, 227 descalabros, 3.16 de efectividad, 3,371 ponches, WAR de 106.6. Todo eso en 5008.1 entradas lanzadas.
En 29 juegos de postemporada con los Bravos de Atlanta, registró una efectividad de 2.81 y un WHIP de 1.19, pero solo un balance de 11-13. El 8 de enero de 2014, fue seleccionado para el Salón de la Fama, en su primer año de elegibilidad, recibiendo el 97.2% de los votos.
CURIOSIDADES DEL MUNDIAL DE FUTBOL
«Me preguntaron todo el tiempo si era el mejor lanzador que vi. ¿Fue el lanzador más inteligente que vi? ¿El más competitivo que vi? ¿El mejor compañero de equipo que vi?
La respuesta es sí a todos», dijo El mánager de los Bravos, Bobby Cox, en el banquete para inducir a Maddux al Salón de la Fama de Atlanta.
Ve el posible destino del venezolano Yeferson Soteldo
Escrito por: @HelmutCanales/Twitter Correo: helmutcanales@hotmail.com
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