Publicado por El club vasco ha ganado la Copa del Rey por primera vez desde 1984, derrotando al RCD Mallorca en la tanda de penaltis de la final del sábado
Bilbao vuelve a ser una ciudad de campeones. Al ganar el sábado la final de la Copa del Rey al RCD Mallorca, superando a los isleños en los penaltis, el Athletic Club ha levantado este trofeo por vigésimo cuarta vez y la primera desde 1984. Desde entonces, había perdido las seis finales de Copa del Rey a las que había llegado, pero el sábado Los Leones fueron capaces de responder a un gol inicial de Dani Rodríguez, empatando por mediación de Oihan Sancet y ganando después la tanda de penaltis por 4-2.
Había motivos para creer que esta vez la final de la Copa del Rey se decantaría del lado del equipo de Bilbao. Y es que el rendimiento del Athletic Club a lo largo de esta temporada ha sido excelente, y actualmente ocupa la quinta posición en LALIGA EA SPORTS, a sólo dos puntos del Atlético de Madrid y de la última plaza que da acceso a la Champions League.
Se trata de una plantilla con mentalidad ganadora, y gran parte del mérito debe atribuirse a Ernesto Valverde. El técnico volvió a San Mamés en el verano de 2022 para dirigir por tercera vez al club en el que jugaba, y por poco no logró la clasificación europea en su primera temporada de vuelta.
Este curso, el Athletic Club ha estado aún mejor y Valverde ha construido la segunda mejor defensa de LALIGA EA SPORTS, gracias a una formación 4-2-3-1 bien organizada. Ese sólido juego defensivo se ha trasladado también a la Copa del Rey, incluso con el habitual portero suplente Julen Agirrezabala como titular en los partidos de esta competición en lugar de Unai Simón. Los Leones sólo han encajado cuatro goles en sus ocho partidos de copa.
Las actuaciones de Agirrezabala a lo largo del torneo fueron importantes, y también fue decisivo al detener uno de los penaltis del RCD Mallorca en la tanda. Esto habla de la fortaleza de la plantilla del Athletic Club, con jugadores menos utilizados, como Asier Villalibre o Malcom Adu Ares, que incluso marcaron varios goles durante la copa, apoyando al tridente habitual formado por Gorka Guruzeta, Nico Williams e Iñaki Williams, que también contribuyeron decisivamente. Curiosamente, los cuatro penaltis que marcó el conjunto vasco en la final fueron lanzados y transformados por jugadores que habían salido desde el banquillo. Entre ellos, Álex Berenguer, que transformó el histórico penalti de la victoria, después de haber transformado también un importante penalti en el campo del Atlético de Madrid en la ida de las semifinales.
Cabe destacar que, en su camino hacia la final de Copa, el Athletic Club se enfrentó al FC Barcelona y al Atlético de Madrid, a los que superó marcando cuatro goles en cada ronda. El bullicioso público de San Mamés ayudó sin duda al equipo a eliminar al Barça y al Atleti, y el Estadio de la Cartuja estaba tan lleno de seguidores de Los Rojiblancos el sábado que la final pareció, por momentos, otro partido en casa para el Athletic Club. Se calcula que unos 100.000 aficionados del Athletic Club viajaron a Sevilla para presenciar la final, la mayoría sin entradas para el partido.
Esta afluencia masiva de aficionados contrastó con las dos anteriores finales de Copa del Rey en las que participaron los vascos, en las que no pudo asistir ningún aficionado debido a la pandemia de coronavirus. En ambas ocasiones, la plantilla del Athletic Club fue elogiada por su enorme deportividad tras la derrota, ya que los jugadores se pusieron en pie aplaudiendo a la Real Sociedad y al FC Barcelona por su éxito. Esta vez, le tocó al capitán Iker Muniain subir a recoger el trofeo y al Athletic Club recibir todos los aplausos.
Muniain y Valverde ya habían sentido el confeti rojiblanco caer sobre sus hombros durante sus carreras en el Athletic Club, ya que el jugador ganó las Supercopas de España 2014/15 y 2020/21 y el entrenador estuvo presente en el primero de esos triunfos. Pero, esta victoria en la Copa del Rey es extra especial.
Como dijo Valverde a los medios tras el partido: “Es increíble, este título no tiene comparación con ninguno. No hay más que ver cómo estaba el campo, lo que supone esto para la afición, los años que llevábamos buscándolo.”
Ahora, el Athletic Club se centrará en poner fin a otra sequía, con el objetivo de volver a la Champions League por primera vez en una década. Valverde y sus jugadores, que ya tienen garantizada al menos la Europa League por primera vez desde 2018, tratarán de dar caza al Atlético de Madrid, cuarto clasificado, en las últimas semanas de la temporada de LALIGA EA SPORTS. El 27 de abril, en la jornada 33, visitarán al Atleti en la capital de España. Dada la mentalidad ganadora que ha demostrado este Athletic Club en lo que va de temporada, harán ese viaje llenos de confianza, y como campeones de la Copa del Rey.
Escrito por Prensa LaLiga
Fotos cortesía de Prensa LaLiga