Publicado por El fútbol dice adiós a una de sus grandes promesas. Luís Nani, el extremo portugués que fue considerado el sucesor natural de Cristiano Ronaldo en el Manchester United, anunció su retiro a los 38 años.
Una carrera llena de luces y sombras llega a su fin. Nani, formado en las inferiores del Sporting de Lisboa, dio el salto a la Premier League en 2007. En Old Trafford, bajo las órdenes de Sir Alex Ferguson, compartió vestuario con CR7 y se ganó un lugar en el corazón de los aficionados ‘red devils’. Con los ‘diablos rojos’ levantó cuatro títulos de Premier League y una Champions League, demostrando su talento y versatilidad en el extremo izquierdo.
En una publicación en sus redes sociales, Nani escribió que «ha llegado el momento de decir adiós» después de «tantos recuerdos inolvidables». «Es hora de pasar página y centrarme en nuevos objetivos y sueños«, escribe el exinternacional portugués.
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Nani y una carrera de altibajos
Sin embargo, a pesar de su prometedor inicio, la carrera de Nani no siguió la trayectoria ascendente que muchos pronosticaban. Tras abandonar Manchester, el portugués pasó por varios clubes, como el Fenerbahçe, Valencia, Lazio y Orlando City, sin lograr consolidarse en ninguno de ellos.
Nani regresó a Portugal a principios de esta temporada para representar al club de su ciudad natal, el Estrela da Amadora, pero no pudo jugar en los últimos encuentros del equipo por el fallecimiento de su padre a finales de noviembre.
Más de 100 partidos con Portugal
Con la selección portuguesa, Nani disputó más de 100 partidos y formó parte del equipo que se proclamó campeón de la Eurocopa 2016. A pesar de los éxitos colectivos, su rendimiento individual no siempre estuvo a la altura de las expectativas.
La retirada de Nani deja un sabor agridulce en el mundo del fútbol. Un talento indiscutible que no pudo alcanzar la cima que muchos esperaban a nivel individual. Sin duda, el portugués será recordado como uno de los grandes jugadores de su generación, con grandes títulos a nivel colectivo, pero con esa sensación de que pudo ser más grande.